Política y Derechos Humanos
Politique et droits de la personne
Politics and Human Rights
Tlahui-Politic No. 2, II/1996 




5º ANIVERSARIO DEL CONSEJO DE PUEBLOS NAHUAS DEL ALTO BALSAS, GUERRERO
Marcelino Díaz de Jesús. Secretario General del CPNAB-CG500ARI



¡NO HA SIDO FÁCIL!

El Consejo de Pueblos Nahuas del Alto Balsas, Guerrero, A.C. (CPNAB), miembro del Consejo Guerrerense 500 años de Resistencia Indígena (CG500ARI), celebró su Quinto Aniversario de vida. Su primer lustro de lucha contra la construcción de la Presa Hidroeléctrica de San Juan Tetelcingo (PHSJT). Se dice fácil, sin embargo, no lo ha sido. Estas fueron las palabras que se repitieron durante la evaluación de un año más de lucha y de trabajo del CPNAB.

Desde aquellos días en que existió un CPNAB ambulante de pueblo en pueblo, desde 1991 hasta nuestros días han ocurrido muchas cosas. Hubo una huelga de hambre encabezada por don Merenciano Máximo González en el zócalo de la Ciudad de México, que sólo fue levantada hasta que logramos la firma de un documento donde se asentaba la suspensión indefinida de la construcción de la Presa Hidroeléctrica San Juan Tetelcingo.

Hubo también que colocar nuestra voz de denuncia a nivel internacional en Europa, Norteamérica y Sudamérica y aún en Asia, en Japón a través del diario Mainichi Shimbun, y en una reunión regional de varios países de la India, cuando luchaban contra la presa Sardar Sarovar en el valle Narmada en la India, (misma que sí fue construida con la anuencia del Banco Mundial, a pesar de grandes protestas a nivel internacional de importantes ONG's). En todos esos lugares solicitamos solidaridad contra la construcción de la Presa Hidroeléctrica San Juan Tetelcingo, que inundaría con sus aguas embalsadas, las tierras, las casas, la cultura, el medio ambiente y la vida de más de 22 pueblos nahuas del Alto Balsas.

El 13 de octubre de 1992, el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari, firmó un documento en el cual se asienta la cancelación total del Proyecto Hidroeléctrico San Juan Tetelcingo, después de realizada la Marcha Por la Dignidad y la Resistencia de los Pueblos Indígenas, que partió desde Chilpancingo, Gro. hasta el Zócalo de la Ciudad de México, del 2 al 12 de octubre de 1992, en el marco de diversas movilizaciones contra los festejos al V Centenario del llamado Encuentro de Dos Mundos, y para festejar los 500 años de Resistencia de los Pueblos Indígenas. Dichas movilizaciones fueron convocadas por el Consejo Mexicano 500 Años de Resistencia India, Negra y Popular, hoy desaparecido, pero cuyas organizaciones en gran parte se encuentran aglutinadas en la Asamblea Nacional Indígena Plural por la Autonomía (ANIPA).

Después de aquellas movilizaciones de 1992, y de haber logrado nuestro primer objetivo, nos dimos a la tarea de reorganizar nuestro CPNAB, que se dividió en dos. Por un lado se quedaron con nosotros los más consecuentes y que optaban por la movilización social como táctica de lucha. Por el otro, quedaban los que preferían la división comunitaria, el enfrentamiento y debilitamiento de nuestra organización como método cotidiano y el acuerdo cupular y de concertacesión junto al gobierno como estrategia. Nos disputamos el mismo nombre, nosotros usamos el nombre de Consejo de Pueblos Nahuas del Alto Balsas, Guerrero, A.C. y siempre aclaramos que somos miembros del Consejo Guerrerense 500 Años de Resistencia Indígena, mientras que la otra parte sólo se llama Consejo de Pueblos Nahuas del Alto Balsas, A.C. Nosotros nos aferramos a nuestro nombre original porque gran parte de la historia común de esa organización la construimos nosotros y no vamos a dejar que se pierda o se manipule tan fácilmente, por gente sin escrúpulos, ni visión política.

También nos dimos a la tarea de elaborar nuestro Plan Alto Balsas (Plan de Desarrollo Alternativo de los Pueblos Nahuas del Alto Balsas, Guerrero-México), un plan que no fue elaborado por agentes externos a nuestra región, sino por la misma gente de los pueblos de la región. Este Plan Alto Balsas fue editado en un folleto y entregado en el marco del V Aniversario del CPNAB, Gro. a cada una de las autoridades municipales, ejidales y de bienes comunales, líderes locales y regionales, para que lo sigan enriqueciendo con sus propuestas e incluso con sus críticas.

Este Plan Alto Balsas, pretende con sus doce programas, buscar el desarrollo regional, fomentando nuestra cultura, cuidando nuestro entorno ecológico y la defensa de nuestros derechos humanos como pueblos indígenas. Actualmente este Plan está buscando financiamiento para su operación total en campo.

La autonomía regional en el Alto Balsas

Durante los festejos del V Aniversario del CPNAB, Gro., se realizó el Taller de Derechos Humanos para los Pueblos Indígenas del Alto Balsas, donde básicamente se orientó a clarificar nuestra propuesta para la creación de la Región Autónoma del Alto Balsas.

Este planteamiento autonómico, lo resumió con claridad Renato Ravelo Lecuona, uno de los ponentes, " en Guerrero fue el CPNAB una de las primeras organizaciones, incluso a nivel nacional, que dan la lucha por la autonomía con su decisión de no permitir la construcción de una presa en su territorio... ustedes están divididos en siete u ocho municipios, aunque son un solo pueblo. Ustedes dieron una lucha por defender su territorio de la construcción de una presa, con eso dieron su primera lucha por la autonomía, habiendo logrado esa primera fase, la defensa de su territorio, lo que les queda es ver cómo se van a gobernar". Ahí es donde está el gran reto.

Desde el 9 de abril de 1995, en la Cámara de Diputados en la Ciudad de México, participamos en la primera Asamblea Nacional Indígena Plural por la Autonomía (ANIPA), de la cual más tarde, las organizaciones participantes tomarían su nombre, donde básicamente nos reunimos para hablar de las modificaciones a la Constitución para que se pueda otorgar autonomía, autodeterminación, autogobierno y desarrollo a los pueblos indígenas. Para ello vimos que era necesario modificar profundamente los artículos 4º, 73, 115 y 116 Constitucional. Esta discusión continuó después en la segunda sesión de la ANIPA en Loma de Bacum, Sonora, en territorio yaqui, para continuar después en el Valle de Jovel, San Cristóbal de las Casas, Chiapas, en el mes de diciembre de 1995.

Los tiempos políticos vinieron a coincidir con los tiempos de la ANIPA. La publicación en un Perfil del periódico de circulación nacional La Jornada provenía de la quién sabe qué parte del Gobierno Federal, -pues el texto completo de ese Perfil, lo habíamos venido trabajando los que asistíamos regularmente a las reuniones del Consejo Consultivo de la Comisión Nacional de Desarrollo Integral y Justicia Social para los Pueblos Indígenas, presidido también por el Director General del INI Carlos Tello Macías, el cual negó que haya sido él quien entregó este documento a La Jornada, hicieron que se acelerara el paso del proceso para la autonomía que buscan los pueblos indígenas.

Sumado a lo anterior, los acuerdos de San Andrés Sakam Ch'en de los Pobres, sobre el temario de la primera mesa "Derechos y Cultura Indígena", nos obligan a nosotros, los del CPNAB, Gro.-CG500ARI, a plantearnos con mayor seriedad nuestra propuesta para la conformación del nuevo municipio del Alto Balsas, tomando en cuenta que en las síntesis indicativas de los asesores gubernamentales y del EZLN, hay coincidencia para la creación de regiones autónomas y reordenamiento territorial para la conformación de nuevos municipios, sin los consabidos trámites interminables, que en la mayoría de los casos tardan muchos años. Tal es el caso del nuevo municipio de Acatepec, en la región de la Montaña de Guerrero, que costó 9 años de lucha y muchos muertos en su largo proceso, para la creación de ese nuevo municipio.

Por otro lado, también la Cámara de Diputados y Senadores en coordinación con la Secretaría de Gobernación lanzó una iniciativa para llevar a cabo la Consulta Nacional sobre Participación Indígena que inició con el mes de noviembre de 1995 y que concluiría en los primeros meses de 1996. En nuestro V Aniversario acordamos participar en dichos foros y encuentros, en cada uno de sus temas, para tratar de incidir con nuestras propuestas sobre autonomía, ya que al parecer, tomarán también en cuenta nuestras propuestas, más las que resulten de San Andrés Larráinzar, para hacer los cambios legislativos en la Constitución en favor de los pueblos indios. En consecuencia, también las leyes estatales serán modificadas, y habrá que dar esa batalla también en los Congresos locales.

La creación de nuevos municipios en Guerrero

En el estado de Guerrero existe la decisión y voluntad de por lo menos 5 casos que están buscando la creación de nuevos municipios. En algunos casos el proceso ya está muy avanzado, sin embargo, las limitaciones que dispone la legislación local, ha impedido que se formalice legalmente la decisión de varios pueblos a reagruparse territorialmente.

Las razones son muchas, pero básicamente es por la falta de libertad política que se ha negado a los pueblos indígenas, para conducir sus procesos de organización interna y de desarrollo comunitario a nivel regional, es decir, por la falta de autodeterminación y autogobierno.

Muchos se quieren separar de sus cabeceras municipales y crear sus nuevos municipios, sus propios municipios, algunos por razones históricas, otros por la lejanía de sus cabeceras municipales, que se traduce en falta de atención y desinterés a sus problemas por parte de las autoridades. Otros más, por razones políticas al observar la marginación y muchas veces también por las divisiones de carácter partidario que fomentan y cultivan los presidentes municipales o directamente personal del Gobierno del Estado, ligados al partido oficial, a través de algunas de sus dependencias de Gobierno. Esta última razón, irrita sumamente a los pueblos, ya que si de por sí los pueblos no tienen grandes facultades de decisión, todavía más, se ven obligados a soportar las decisiones de sus presidentes municipales y del gobierno, es decir, del centro o de "arriba" como suelen decir nuestros hermanos indígenas, sin tomarlos en cuenta, para mantenerlos divididos, ya que algunos miembros de las comunidades, debido a algunas prebendas que les otorga el partido oficial, están dispuestos a apoyar tales decisiones aunque en ello vaya la dignidad y unidad de sus comunidades.

En fin, de muchas formas son agredidas las comunidades y sus autoridades municipales locales, muchas veces también, no son reconocidas. Ello ha provocado que se piense en salidas tales como la creación de nuevos municipios, donde entre todos se puedan gobernar y dar un gobierno incluyente, plural, democrático y tolerante.

Los nuevos municipios que se quieren crear y que más se conocen son los siguientes: Hueycantenango (Chilapa), Santa Cruz del Rincón (San Luis Acatlán) o Municipio Montaña Sur, Rancho Viejo (Tlacoa- chistlahuaca), Marquelia y Municipio del Alto Balsas (abarca cuatro municipios: Tepecoacuilco, Zumpango, Mártir de Cuilapan y Huitzuco).

El Gobierno de Guerrero ha anunciado la creación de cuatro municipios, luego de la masacre de Aguas Blancas. No sabemos si existen razones fundadas de los propios pobladores, o si esto se debió más a razones políticas circunstanciales donde se piensan crear municipios, o de nueva cuenta se darán decisiones desatinadas, sin atender verdaderamente a los pueblos que en verdad demandan la creación de nuevos municipios.

Si tal proceso de reordenación territorial obedece a un genuino sentir de los pobladores de dichos municipios, convertida en su demanda central, entonces estaríamos hablando, no nadamás de la creación de 5 nuevos municipios, sino de nueve municipios nuevos, y quién sabe de cuántos más, que estarían siguiendo el ejemplo de la reorganización territorial de estos municipios, cuando la legislación nacional, permitiera tal posibilidad.

En tal virtud, nosotros, los miembros del Consejo de Pueblos Nahuas del Alto Balsas, Guerrero, A.C., llamamos a coordinar esfuerzos con esos otros movimientos sociales que pretenden la creación de nuevos municipios. Para tal efecto, será necesario que vayamos arribando a reuniones previas, con los principales dirigentes de tales movimientos "neomunicipalistas", en un contexto de lucha nacional, por la reordenación territorial del los municipios indígenas, bajo la orientación que plantea la ANIPA, es decir, bajo la propuesta de crear regiones autónomas pluri o monoétnicas. Será necesario llegar a un foro estatal con todos los principales actores sociales, que buscan la creación de nuevos municipios en zonas indígenas o mestizas, sin desligarnos de la actual coyuntura política nacional por la que atravesamos.

Es en este contexto que se inscribe la lucha por la creación del nuevo municipio del Alto Balsas. Así fue acordado por unanimidad y consenso y a grito abierto desde los pechos agitados por la emoción de este nuevo proceso de lucha, por alcanzar el reconocimiento de nuestros derechos plenos como pueblos indígenas, tantas veces negados. Así quedó asentada en la Declaración de San Miguel Tecuiciapan, que es un acuerdo general a cumplirse para el siguiente año de trabajo, que se emite en cada reunión anual de evaluación y análisis del CPNAB, coincidiendo con nuestro aniversario en el mes de octubre de cada año.


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