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Por la Senda de la Impunidad
Tlahui-Politic 9 I/2000. Información enviada a Mario Rojas, Director de Tlahui. Chile, a 8 de Junio, 2000. CHILE: Por la Senda de la Impunidad. Por Sergio Ramírez.
Para el Presidente Lagos todavía no es el momento para adoptar una
definición final en materia de DD. HH, más si todavía espera que la "Mesa de
Diálogo" culmine su trabajo y entregue sus conclusiones. Así lo ha
afirmado, en momentos en que la oposición insiste en que dicha instancia no
llegará a buen término y que se requiere una salida política. Por eso,
demanda la creación de una comisión encabezada por Andrés Zaldívar (DC) que
ponga punto final al problema de los DD. HH, no sancionando a los genocidas
del período dictatorial.
El fallo de la Corte de Apelaciones de Santiago que acogió el desafuero del
dictador, declarando que ha lugar a la formación de causa en su contra por
delitos de secuestros calificados, quedará como una de las sentencias más
importantes que se haya dictado en relación a DD. HH. Por su edad, es
probable es que nunca alcance a dictarse condena. Pero, también, es posible
que sea liberado por acuerdo de las cúpulas políticas del sistema. En
efecto, el pinochetismo, con y sin uniforme,. el gobierno y el oficialismo
están interesados en que no se haga justicia real. Los que ayer lloraban
por traer desde Londres al dictador por estar sometido a "un juicio
político" y que aseguraban que los tribunales chilenos sí que eran
competentes para juzgarlo, han cambiado su discurso. Hoy, unos alegan la
incompetencia de tales órganos judiciales y, los otros, inventan falaces
"argumentos" para poner punto final al problema de los DD. HH. En este
contexto, el gobierno de Lagos, por una parte, reitera la necesidad de
dejar actuar a los tribunales, por otra respalda la "mesa de diálogo". Por
eso, las declaraciones de políticos cupulares anuncian espúreas tratativas
para lograr un acuerdo que sancione una impunidad total.
Recientemente, Lagos sostuvo que la "mesa de diálogo" ha realizado un gran
esfuerzo para conocer la verdad de las violaciones a los DD. HH y que dicha
labor debe ser complementada con otras medidas. En tal sentido se
intensifica una negociación con la derecha y las cúpulas militares. En
efecto, ratificando su pensamiento, expresó: "Me gustaría esperar que ellos
concluyan su tarea antes de tomar otras definiciones". Sus esperanzas están
en lograr un acuerdo político que decrete el término de la transición,
consolidando la impunidad. Al respecto, agregó que "no cabe dudas que si
esta instancia hace bien su trabajo se habrá dado un gran avance para la
reconciliación del país, en especial si se pueden encontrar los restos de
los detenidos desaparecidos y con ello, darles sepulturas". Y, eliminando
dudas sobre sus intenciones, al ser consultado si la "mesa de diálogo" no
logra establecer el paradero de los cuerpos, Lagos dijo que todavía es
temprano para opinar sobre ello y que lo mejor es esperar que llegue ese
momento antes de conversar.
En apoyo a los objetivos del presidente, el Ministro Secretario General de
Gobierno, Claudio Huepe (DC), en falaces argumentos, recalcó que el
Ejecutivo valora y respalda la misión realizada por la "Mesa de Diálogo",
porque es una "instancia que ha colaborado con la unidad de los chilenos y
el único lugar donde se han podido reunir las partes en conflicto en el
tema de los DD. HH". Demagogia y mentiras distorsionan la verdad. La "mesa
de Diálogo", instrumento de impunidad al representar los intereses
políticos del gobierno y del oficialismo y las aspiraciones de impunidad de
las cúpulas castrenses, no es expresión de unidad de los chilenos. Tampoco
es punto de encuentro de las partes en conflictos, como lo demuestra el
hecho de que las organizaciones de familiares de las víctimas del
genocidio, no sólo no están representadas sino que también repudian los
intentos de negar verdad y justicia, objetivo de los que integran y
aplauden tal engendro.
Mientras tanto, la derecha ve acortarse los plazos para presentar sus
proyectos de reformas constitucionales y de punto final a las violaciones a
los DD. HH. En efecto, el presidente de RN, Alberto Cardemil, presionando al
gobierno, insiste en que la "Mesa de Diálogo" no tendrá éxito por cuanto se
le plantea como meta encontrar las osamentas de los detenidos
desaparecidos. Respecto a lo cual, enfatiza que las FF. AA han señalado no
poseer información institucional. Y, agrega que el PS. retraza una
resolución en espera de la concreción de un acuerdo político global de
impunidad que se recompense con algunas reformas constitucionales. Desde
esta perspectiva, Cardemil afirma que cualquier solución que provenga de la
mesa se verá dilatada: "La mesa está sostenida sobre palitos y papeles bajo
las patas".
UNA SALIDA POLÍTICA DE IMPUNIDAD. Senadores de la DC analizaron diversas
alternativas que permitan consensar posiciones con la derecha. Partiendo
de la reaccionaria y falaz visión de que la sola resolución de los
tribunales en el caso Pinochet y los acuerdos de la mesa de diálogo en el
tema de los DD. HH no bastarán para dar solución a los problemas de la
transición, manifestaron la necesidad de buscar una salida política de
impunidad, que "permita al país dejar de lidiar con los temas del
pasado.. ". Así lo planteó el senador Adolfo Zaldívar, recibiendo el
respaldo del PDC, que a través de su presidente Ricardo Hormazábal dijo que
era lógico pensar que se debía llegar con la discusión al plano político.
Posteriormente, los senadores DC Gabriel Valdés, Rafael Moreno y Edgardo
Boeninger (designado), ratificaron la necesidad de un acuerdo político ("No
podemos seguir indefinidamente en una situación que agrieta la convivencia
nacional").
Andrés Zaldívar, presidente del Senado, fue más directo. En entrevista a
"La Segunda", manifestó su visión acerca del fallo que debe adoptar la
Corte Suprema respecto del proceso al ex dictador. "No les estoy diciendo a
los jueces 'por favor, díctenme un fallo que me permita hacer la
negociación', pero espero y confío en que la Corte va a actuar como
corresponde, que va a estudiar a fondo el asunto y a mirar con una visión
de país cómo dar una solución justa". Tal declaración, acerca de las
repercusiones que tendría el proceso en la búsqueda de acuerdos para el
cierre de la transición, provocó inquietud en el interior de la
Concertación. En Alemania, Lagos, dijo que leyó con bastante detenimiento
las declaraciones de Zaldívar sobre los efectos negativos que tendría el
desafuero de Pinochet en el avance de las reformas, destacando que en sus
dichos fue muy cuidadoso y que "en esas declaraciones no hay presión al
Poder Judicial y estoy cierto que no lo haría". En todo caso el presidente
afirmó que no se opone a que haya un "cierre político" al tema de los DD. HH
pero enfatizó que para ello es previo saber dónde están los detenidos
desaparecidos. En cambio, el senador Jorge Pizarro (DC) dijo que el
pensamiento de Zaldívar es una "presión velada" en contra de los Tribunales
de Justicia para que no procesen a Pinochet.
SE INICIA UNA NUEVA ETAPA. La confirmación del desafuero de Pinochet por la
Corte de Apelaciones y lo que suceda en la Corte Suprema señalan el
comienzo de una nueva etapa, caracterizada por las presiones de la derecha,
el mando militar y las organizaciones patronales, tendientes a establecer
la continuidad de la impunidad y el modelo político y económico, con la
anuencia del gobierno y del oficialismo. Todos, con la inconsecuencia
habitual, saltan a la palestra pública procurando tales objetivoso,
mientras no cesan de aumentar en los tribunales la querellas criminales
contra el Chacal del Mapocho.
Lo innegable es que pese a los reiterados subterfugios utilizados para
paralizar las demandas de justicia, a los llamados a "cerrar el pasado",
reflotar la mesa de diálogo y sugerir nuevas fórmulas de "soluciones
políticas" para imponer "perdón" e impunidad a los criminales, a cambio de
una parte de la información sobre el paradero de algunos detenidos
desaparecidos, existe una situación nueva caracterizada por el hecho de que
los criminales ya no tiene la arrogancia de considerarse "invulnerables" e
"intocables", y por la existencia de 2 alternativas antagónicas para
enfrentar los problemas de los DD. HH: Una, concentra sus esfuerzos y
presiones por imponer una salida política, contra la voluntad y a espaldas
del pueblo, que impida la acción de la justicia. La otra, reitera castigo a
los asesinos mediante la denuncia pública de los crímenes de lesa humanidad
cometidos por orden de Pinochet. Ante esta realidad, nadie tiene derecho a
mantenerse al margen de contribuir a abrir paso a la justicia. Más allá de
la alegría que significa el desafuero y el inicio del procesamiento a
Pinochet, existe la posibilidad franca de iniciar un proceso difícil de
detener. En el cual, las demandas de justicia pueden ser realidad. La única
forma de lograrlo es mediante la lucha.
From: Comité Internacionalista Arco Iris ale.Ramón@numerica.it
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