LA REFORMA DE LA SEGURIDAD SOCIAL MEXICANA. IV/V 

Análisis, testimonios y comentarios
In memoriam de Don Eduardo Alonso Escárcega RIP 

La Reforma del SIVCM

1. Reforma legislativa:

El MUNJP demanda una serie de iniciativas legislativas que rescaten la justicia social, que impulsen la humanización del sistema de Seguridad Social y que dignifiquen al ser humano en su integridad:

a). Reforma constitucional para elevar a rango constitucional el derecho a la jubilación, lo que implicaría la modificación del Artículo 123, apartado A, y lo respectivo en la Ley Federal al Trabajo.

b). Reforma a la Ley del Seguro Social para que ninguna pensión sea de un monto inferior al salario mínimo, y para que la misma se adapte individualmente, de manera proporcional, al último salario que como trabajador activo haya tenido el asegurado. Los aumentos de los salarios mínimos se aplicarán de manera automática al monto de las pensiones.

La Ley y Reglamento Interno del Seguro Social deberán reformarse de manera adecuada a las nuevas necesidades de modernización administrativa, particularmente en relación a la demarcación exacta de los porcentajes de participación de las tres fuentes de ingresos, así como al respecto de la administración e inversión de fondos.

La ampliación y mejoramiento de los servicios médicos y del régimen de jubilación, tendrá también necesidad de una reforma en los artículos respectivos de la Ley.

2. Modernización administrativa:

En el campo administrativo el IMSS deberá actualizar su trabajo en concordancia a las necesidades de la vida moderna. El desafío es, en resumen, utilizar los más avanzados sistemas de administración para poder cumplir con eficiencia las necesidades colectivas e individuales del universo de asegurados. Las principales directivas de la modernización administrativa serían las siguientes:

a). Replanteamiento de la concepción misma del régimen de jubilación, abriendo el espacio a la introducción de diferentes variantes modernas, que han demostrado su eficiencia en otros países.

b). Reforma administrativa del sistema de financiamiento. Modernización de la política de aprovisionamiento, contabilidad, evaluaciones actuariales, estimaciones de costos y proyecciones económicas de vanguardia.

c). Gestión óptima de los activos, establecimiento de un fondo capitalizable del SIVCM, composición del activo, análisis prospectivo del activo/pasivo, política de comunicación con la población asegurada sobre el manejo de los activos y pasivos. En este campo, como segunda opción se podría desarrollar un proyecto cooperativo de la seguridad social.

d). Análisis de necesidades y mecanismos de vigilancia de la aplicación de las leyes y reglamentos.

e). Planificación de la jubilación: consultas individuales, seminarios y simulaciones.

f). Gestión adecuada de la remuneración de los recursos humanos y de la comunicación.

3. Ampliación y mejoramiento de los servicios

 Los servicios que el IMSS proporciona a las familias de los trabajadores en retiro, adolece de notables vacío, esto sin dejar de reconocer que la calidad y amplitud de servicios han alcanzado un nivel de desarrollo importante, comparable a los de los países desarrollados. De cualquier forma, con una actitud positiva, la institución puede y debe mejorar y ampliar de manera permanente sus servicios, con tal objeto, se podría sugerir:

a). Las prioridades de la prevención:

 En el marco de la prevención y la seguridad en el trabajo, se debe insistir que las empresas e instituciones adquieran las tecnologías, máquinas, productos y la capacitación de personal de manera óptima o superior a las normas de salud, seguridad y protección del medio ambiente. La prevención y la eliminación de los peligros continúan siendo los mejores medios para disminuir los riesgos de accidentes y las enfermedades del trabajo.

b). La rehabilitación:

Es necesario proteger el derecho a la reintegración al trabajo, en especial de las trabajadoras y trabajadores que sufren o han sufrido de alguna enfermedades del trabajo, o que han pasado por diferentes tipos de incapacidades temporales, que les ha dejado cierto grado de invalidez. Las personas readaptados que no regresan a su trabajo de origen tienen pocas oportunidades de encontrar otro empleo. Es por tanto prioritario que los readaptados puedan regresar a su puesto de trabajo original o en otro que tome en cuenta sus capacidades.

A fin de favorecer une readaptación más rápida y eficaz de los trabajadores accidentados o afectados por las enfermedades del trabajo, se deben mejorar los servicios clínicos y desarrollar otros nuevos de medicina del trabajo. Los nuevos servicios clínicos deberán adoptar una orientación multidisciplinaria bien integrada al conjunto de servicios sociales y de salud.

c). La terapia ocupacional:

El trabajo adecuado, como terapia de rehabilitación, es una alternativa poco explorada. Los valores culturales dominantes en la sociedad mexicana, considera erróneamente que la jubilación es la última etapa de la vida, fuertemente asociada con la inactividad, con la incapacidad, y peyorativamente con la inutilidad. Las estadísticas han demostrado que la salud, el bienestar y el promedio de vida, es superior en los jubilados que se mantienen activos laboralmente, que aquellos que optaron por la inactividad.

d). La ampliación de los servicios:

Los trabajadores en retiro sufren de una serie de problemas de salud, como resultado "natural" de la tercera edad. El IMSS deberá de ampliar los servicios en el área específica de la geriatría, para la prevención de problemas psicosociales, en la fisioterapia de rehabilitación, en el acceso a los aparatos ortopédicos y de locomoción, cuidados especializados de enfermería, así mismo en odontología y oftalmología.

Los jubilados y pensionados destinan una cantidad importante de sus recursos, en los casos en que disponen de ellos, en el pago privado de medicinas paralelas como la masoterapia, la acupuntura, la fitoterapia, la quiropráctica, el naturismo, la gimnasia y los ejercicios físicos dirigidos. Con una inversión razonable, el IMSS podría incluir esos servicios. Es importante decir que hay ya numerosos seguros de salud en los países desarrollados que cubren los gastos en acupuntura, masoterapia, quiropráctica y homeopatía entre otros.

La urgencia coyuntural de los trabajadores: pasar a la ofensiva propositiva

 La aprobación de la nueva Ley del Seguro Social no terminó con los problemas de la seguridad social, hoy es necesario la implementación de un plan emergente para la consulta y la elaboración de un verdadero proyecto alternativo de reforma de la seguridad social. El seguimiento adecuado del proceso de consulta debería manifestarse en logros y avances concretos en tiempos bien establecidos. En nuevo proyecto tendrá que considerar invariablemente la necesidad de reiniciar el diálogo con el gobierno mexicano.

Es pues apremiante que los trabajadores presenten al Ejecutivo Federal y a la Nación entera, un proyecto realizable, serio y técnicamente sólido, en materia de seguridad social y de jubilaciones, pensiones, invalidez, cesantía y muerte. Con un proyecto así, los jubilados podrán impulsar a su más alto nivel, su vocación propositiva de vanguardia y potencializar una ofensiva movilizadora con un enorme peso moral.

Los conflictos de intereses: primer problema a superar

 Durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, una serie de conflictos de intereses empañaron las relaciones entre el IMSS, los trabajadores y los patrones. En esos años el instituto recogió además la inercia de todo un largo proceso de deterioro de su imagen ante la sociedad. Con Zedillo la relación empeoró, el proceso de aprobación de la nueva Ley del IMSS polarizó terriblemente las relaciones entre las partes, la parcialidad del gobierno rompió los vínculos con la base trabajadora. Para mejor comprender la situación actual, se comentan, de manera somera, algunos puntos de opinión y los problemas críticos de mayor tensión entre las partes.

a) Los derechohabientes y trabajadores:

En el seno de las familias de los trabajadores se han desarrollado numerosas tendencias críticas en contra del IMSS, con fundamento o no, ellas existen y merecen su consideración, la gente en general se queja de las limitaciones del cuadro básico de medicamentos, de su "baja calidad", de la burocratización y de la deshumanización de los servicios. Tres elementos han unificaron a los trabajadores en contra del instituto: las bajas pensiones, la desaparición del fondo del SIVCM y las iniciativas privatizadoras.

Las bajas pensiones han causado la indignación de importantes sectores de la población, las protestas del MUNJP ha despertado la solidaridad de la sociedad entera. La desaparición del fondo del SIVCM, la transformación artificial de su superávit histórico en un déficit de generación espontánea, han dejado a los trabajadores en retiro y en activo en la inseguridad angustiante e incertitud casi desesperada. Con la misma intensidad de su indignación, los trabajadores han perdido la confianza en la capacidad e integridad administrativa del instituto.

Los intentos privatizadores tampoco han sido bien vistos por las organizaciones sindicales. El MUNJP, como representante que es, de la generación de trabajadores fundadores de la Seguridad Social en México, ha simpatizado siempre con los programas sociales y reconoce en la privatización un salto atrás, un salto que dejará la Seguridad Social en manos de la generosidad exclusiva de los patrones. Entre otros, el temor por la privatización se manifestó de manera radical cuando el IMSS intentó privatizar los centros de recreación, tales como el Centro Vacacional de Oaxtepec y más recientemente ante el proyecto "Zedillo" que quería dejar el manejo de los fondos de ahorro de los trabajadores y jubilados en las manos de las "administradoras" privadas.

Los antagonismos naturales entre los trabajadores y los patrones han tenido momentos álgidos de tensión. Ante la negativa de los patrones para apoyar los cambios legislativos que permitirían el aumento de las pensiones, los trabajadores señalaron a los patrones como responsables de la transferencia del superávit del SIVCM para llenar el vacío del déficit del Seguro de Enfermedad y Maternidad (SEM). Los trabajadores afirmaban que desde la fundación del IMSS, los patrones habían entregado un porcentaje insuficiente de recursos financieros para la institución, provocando un déficit histórico en el SEM, desde esta óptica, la administración del IMSS había tenido que utilizar los fondos del SIVCM para poder mantener los servicios y el proceso de desarrollo del SEM. Los trabajadores consideran que la nueva Ley del IMSS fue un proyecto impulsado de hecho por los patrones y apoyado después por Fidel Velazquez de la CTM.

b). Los patrones:

Los patrones se han quejado siempre de las altas cuotas que tienen que pagar para el financiamiento del IMSS. En 1993 los patrones aseguraban cargar con el 80 % de su financiamiento y se quejaban fuertemente de que el gobierno financiaba apenas el 5% del instituto. En su opinión, es el gobierno el único responsable del déficit del SEM y criticaron, por consecuencia, las ineficiencias técnico-administrativas del instituto.

Así mismo, los patrones han dejado sentir también sus dudas en torno a las directivas administrativas del instituto, insinuando que este responde más a los intereses partidarios del gobierno, que a los objetivos originales de servicio para los que fue creado.

Por otra parte, es necesario considerar que la situación económica de los empresarios mexicanos tiene importantes disparidades internas. Apenas 40 o 50 grandes empresarios han podido beneficiarse de las ventajas del TLC, e incluso a través de la especulación de la bolsa, provocaron una devaluación que les permitió duplicar sus capitales de un día al otro. Los empresarios medios resisten los embates de la crisis, y más de 200 mil medianos y pequeños empresarios se encuentran con la cartera vencida, en quiebra y endeudados con las instituciones bancarias. En general, la clase empresarial mexicana se encuentra en una situación económicamente crítica, condición que limita sus posibilidades para acudir en apoyo de los programas de Seguridad Social, pero que abre las puertas en la búsqueda de nuevas alternativas.

Condicionadas por la crisis, las relaciones de los patrones con el IMSS pasan por uno de sus peores momentos. En la misma forma, la desconfianza en torno al espíritu reivindicativo de los obreros, les hace tomar su distancia, mientras más lejos mejor, es su conclusión equivocada.

c). El IMSS:

En el terremoto de la recesión, el instituto siente que los tres muros de sustento se le vienen encima. El gobierno, los trabajadores y los patrones, todos lo quieren de su lado, cual más lo jala a su rincón, pero como el poder del Estado tira mejor, el instituto ha terminado por aliarse, casi fundirse, con el gobierno.

El instituto cuenta con un grupo de administradores y de expertos en los servicios de Seguridad Social de alto nivel, de gran experiencia y con una tradición nacionalista que busca verdaderamente el mejoramiento de los servicios en beneficio de los derechohabientes, cualquier persona que conozca al instituto no podrá negar esa realidad. Sin que lo diga públicamente, el personal técnico del instituto se siente preocupado de la intervención de intereses partidarios en las directivas de trabajo, ellos conocen por ejemplo, que el desvío de los fondos del SIVCM para cubrir el déficit del SEM fue una determinación política impuesta desde el exterior y no una decisión administrativa técnica y moralmente recomendable. Ellos conocen a profundidad el déficit del SEM y el del Seguro de Riesgos de Trabajo (SRT), saben que ésta es el resultado de la gradual pero permanente reducción de la participación financiera del Gobierno Federal, sin embargo guardan la discreción, en ocasiones, pasan a acusar a los empresarios del déficit presupuestal.

Por otra parte, el IMSS considera que la población se equivoca en sus críticas relacionadas a la deshumanización y al burocratismo. Tiene cierta desconfianza de las iniciativas sindicales que intentan presionarlo en dirección de mejorar los servicios, así mismo se siente asediado por las demandas de los jubilados y pensionados.

Sin más aliado que el gobierno, el instituto se encuentra en una situación de desprestigio social, de aislamiento y de pérdida de su credibilidad como institución de servicio. La alianza incondicional con el gobierno lo condujo a la pérdida de su imparcialidad partidaria y de su neutralidad institucional para meterlo en un callejón sin salida, a una especie de círculo vicioso fatal, en donde a mayor aislamiento mayor es su alineamiento partidario y al crecer su alineamiento, crece también su aislamiento social.

Ese círculo puede conducir al IMSS a la pérdida de sus objetivos y de su propia razón de existencia. El gobierno, los trabajadores, los patrones, los tres en igualdad de responsabilidad, tendrán que hacer lo necesario para sacar al IMSS del atolladero, la solución cardinal es simple, el IMSS necesita ser respetado y apoyado por todos, la institución debe gozar de las condiciones indispensables que le permitan recuperar su función de servicio social, equilibrado, imparcial y ajeno a cualquier interés partidario. El IMSS debe servir a todos por igual, sus directivas deberán tomarse con el mejor rigor científico-humanista y como única voluntad la de servir mejor a sus derechohabientes.

Es urgente establecer un clima de confianza y de diálogo creativo

 Ningún proyecto podrá arribar a feliz término, ni a dar sus mejores frutos sociales, si no cuenta desde su origen con el apoyo y el consenso de los trabajadores, del gobierno y de los patrones. Es de fundamental importancia recuperar la confianza e impulsar una alianza estratégica entre trabajadores, institución y empresarios, que permita establecer sólidamente, las bases teóricas y prácticas de un proyecto integrador y de vanguardia en el campo de la Seguridad Social y del SIVCM.

Siglas y abreviaturas empleadas en los textos 
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